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LEVANTA LA CORTINA

Este proyecto es una celebración de la belleza, tanto artística como humana.

Construido como un himno de resiliencia y resistencia, se opone a los desafiantes eventos y decisiones políticas del año pasado.

 

Cobra vida como consecuencia del enorme vacío que ha quedado en mi corazón como resultado de los interminables meses que me privaron de todo lo que me importa y por lo que creo que vale la pena vivir.

Las conexiones y la libertad que provienen del movimiento y el arte.

 

Esta pandemia nos ha puesto contra la pared, y ha dejado profundos daños además de la terrible pérdida de vidas inocentes.

Ha provocado una fractura en la sociedad y en el alma, dejando una herida abierta y sangrante que es difícil de curar.

Ha reducido la esencia de nuestras vidas a una mera presencia, más que a una participación activa.

Hemos sido encerrados, distanciados, silenciados y obligados a vivir una vida material y surrealista. Una vida donde el arte y la creatividad no se han tenido en cuenta en absoluto, ni se han considerado esenciales para la supervivencia.

Nos hemos visto obligados a pasar nuestros días rebotando entre los supermercados, el hogar y el trabajo (para aquellos que tienen la suerte de tener todavía un trabajo) sin ninguna ayuda externa para revitalizar y fortalecer nuestros cuerpos y mentes.

 

Los artistas, y los espectadores con ellos, han sido atados, con los brazos a la espalda, obligados a arrodillarse y ejecutados, sin posibilidad de alzar la voz o luchar por sus derechos. Un veredicto difícil de tragar que, sin hacer caso de nadie, rápidamente dejó a miles de personas con las manos vacías, esperando un milagro que nunca llegó.

Y junto a ellos, teatros, cines, circos, salas de conciertos, festivales, museos, galerías de arte, todo cerrado. Espacios consumidos por ecos vacíos y silenciosos, polvorientos y abandonados, dejados al borde del fracaso.

 

Este proyecto surge como un recordatorio para las personas de la belleza del arte y para mostrar que los espectadores y los artistas están extremadamente interconectados. Son la razón de la existencia de los demás.

También se centra en subrayar la conexión entre el cuerpo y la mente. Así como la influencia de la salud mental en sobre la salud física.

Eliminar todo lo que nos hace humanos y que contribuye a la liberación de las fundamentales hormonas de la felicidad, es el primer paso hacia la enfermedad y la muerte.

Muerte física y social.

No importa si eres un artista o un espectador, una vez que lo quitas todo, solo eres la cubierta polvorienta de un corazón sin pulso.

 

Por ultimo, este proyecto llega al final de un año que puso a prueba a una gran cantidad de personas. Un año que nos vio repetidamente como ganadores y perdedores, obligados a enfrentar nuestras sombras más oscuras en busca de energías en los rincones más lejanos y escondidos de nuestro corazón, sin ninguna ayuda externa.

El final de este año, a pesar de todo, nos encuentra todavía aquí, luchando duro y celebrando la belleza, con la más profunda esperanza en nuestro corazón de que el nuevo año nos traerá de vuelta todos los elementos que son imprescindibles para hacer nuestras vidas memorables y valiosas de nuevo.

 

 

 

Roma, 20 de diciembre de 2020

 

 

 

 

Agradecimientos.

 

Mi más profundo agradecimiento a todos los artistas y teatros que reaccionaron y participaron en este proyecto con gran entusiasmo y con el corazón abierto.

Gracias por ofrecerme su tiempo y espacio en ese período, y gracias por hacerse pasar por representantes de esas macrocategorías fuertemente afectadas por esta pandemia.

Todas las fotos de este proyecto han sido tomadas en Roma, corazón palpitante y capital de mi hermoso país natal.

 

 

Un sincero agradecimiento también a mi hermano y asistente Stefano Dattrino (IG @brino_artist), intérprete completo (trapecista, acróbata de circo y actor de teatro) y apoyo fundamental y ayuda en la coordinación del proyecto.

En orden de fotos:

 

Cristina Pietrosanti (IG @cristina_pietrosanti23) bailarina, performer, trapecista, representante de trapecistas.

Fotografiada en el interior del Teatro Vascello, dirección artística Manuela Kustermann.

 

Antonella Salvatore (IG @antonella__salvatore) actriz de teatro, en representación de actores.

Fotografiada en el interior del Teatro De Servi, dirección artística Stefano Marafante.

 

Raffaella Zappalà (IG @patiraffa), actriz y mimo, representando a los mimos.

Fotografiada en el interior del Teatro Abarico, dirección artística Umberto Bianchi.

 

Keba Seck, bailarino y profesor de danza afro, Sow Saouda, percusionista, en representación de bailarines. Fotografiados dentro de SpinTimeLabs, centro cultural polifuncional gestionado por el colectivo artístico SpinOff.

 

Federico Millimaci (IG @duepuntodue_service) ingeniero de sonido, en representación de los técnicos.

Fotografiado dentro de Cinecittà World, CEO Stefano Cigarini.

 

Simone Martino (IG @simonemartinomusica), pianista y compositor, y Sharon Alessandri (IG @sharonalessandri), cantante y actriz, en representación de los músicos.

Fotografiados en el interior del Teatro Arciliuto, dirección artística Giovanni Samaritani.

 

Fabiola Zossolo (IG @fabiolazossolo), bailarina clásica, representa a los bailarines.

Fotografiada en el interior del Teatro Degli Audaci, dirección artística Flavio De Paola.

 

Antonino Casile (IG @nino.casile), bailarín contemporáneo, representante de musicales.

Fotografiado dentro de Cinecittà World, CEO Stefano Cigarini.

 

Stefano Dattrino (IG @brinoartist), artista de circo, trapecista, actor de teatro, que representa a los artistas de circo.

Fotografiado dentro de Cinecittà World, CEO Stefano Cigarini.

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